Hacia Abril florecerán las Glicinias, Cercis, Lilos,
Bola de Nieve, Camelias, Bergenias, Lirios, Tulipanes. En Mayo: Claveles,
Geranios, Magnolia, Mahonia, Ribes, Prímula, Saxifraga, Narcisos,
Rosales, Lavanda, Jara, Majuelo, Laburno, Acanto, Azalea, Genista, Aubrieta,
Calendula, Paeonia...

Ramillas de almendro en flor
TRABAJOS
Plantación: Al
principio planificaremos bien las plantaciones de todo tipo a realizar
durante la temporada. Acondicionaremos
aquellos lugares donde se plantarán las anuales y bienales que
florecen mediada la primavera. Practicamente podemos sembrar y plantar
de todo: anuales resitentes, herbáceas,
los árboles y arbustos que vienen en contendor... También
pondremos en el suelo los plantones de cualquier tipo. Los especímenes
de hoja perenne no se deben plantar o transplantar cuando hayan comenzado
a subir las temperaturas, siendo mejor dejarlo ya para la próxima
temporada. A mediados de la estación se planta de lo que florece
en verano.
Multiplicación: Aprovechamos para preparar de esquejes. A finales
de la estación se recogen las semillas de las plantas que ya
han florecido.
Poda: Se realizan las
últimas podas antes de que empiece el crecimiento. Primeros recortes
de los setos, seguidos de cortes de mantenimiento según lo vayan
necesitando. Algunas plantas habrán de ser podadas nada más
terminar la floración.
El
Riego: Al
principio de la temporada haremos el revisado, ajuste y puesta en marcha
del sistema de riego. Entonces se puede activar a mitad del día.
Después iremos haciendo los riegos más frecuentes y si
el calor es intenso se deben realizar por la mañana o al atardecer.
Cuando se acerque el verano los riegos serán más copiosos
y nunca en la horas de calor.

Acolchado de un arbolito con materia orgánica
Abonado: En Marzo todavía
se puede añadir mantillo o estiercol al suelo. Si se deja para
más tarde puede quemar las plantas. Comenzar a abonar los macizos,
los arbustos y los árboles, con mantillo o abono.
Protección: Quitaremos las
protecciones de las plantas delicadas cuando el tiempo comience a permitirlo.
Cuidado con la heladas tardías.
Algunas
plantas necesitarán ser entutoradas según vayan creciendo.
Limpieza: Las especies anuales
se eliminan según vayan floreciéndo y secándose.
Plagas: Se pueden presentar
los primeros insectos indeseados, como los pulgones. Es el momento idóneo
para el tratamiento preventivo de plagas y enfermedades. Eliminar las
malas hierbas que también surgirán con fuerza.
Suelo: Hacia
abril conviene escardar todas las zonas del jardín. Es buen
momento para trabajar el suelo.
El
Césped: A partir de que el tiempo
comience a mejorar podemos semillar el cesped nuevo. También
se reparan lo huecos, sembrando o a base de tepes, y se nivelan las
irregularidades de la pradera. Ya se puede empezar a cortar. El primer
corte se dará con la superficie de la hierba más bien
seca. Antes se debería rastrillar para limpiarla y desapelmazarla.
Cortar poco, solo las puntas, y antes de que alcance unos 8 cm. de altura.
Según avanza la estación la hierba crece con más
fuerza. Segaremos con más regularidad y con las cuchillas más
bajas. Es el mejor momento para sembrar, ya que las semillas se desrrollarán
con rapidez. Cuidado
con los pájaros y las hormigas que puede hacer fracasar la siembra,
ya que se comen las semillas. También se pueden aplicar abonos
y herbicidas selectivos para acabar con las malas hierbas.
Cuando se acerque el verano es el mejor momento para abonar. Se siega
más a menudo, sin dejar nunca que la hierba crezca exageradamente.
Si no se ha hecho, ya es mejor dejar la siembra hasta la próxima
temporada.

Espectacular plantación de tulipanes
Bulbos: A principios de la estación, cuando
el tiempo comience a mejorar, se colocan
los bulbos que florecen en verano. Algunos de los plantados anteriormente
comienzan a florecer. Los que continúan almacenados se han de
seguir controlando por si se pudren.
Según las flores se marchitan se van retirando. Los bulbos que
terminan su floración por completo se pueden poner en macetas,
así se deja libre el suelo y se permite que completen su crecimiento.
Cuando se termina la floración, es el momento de abonarlos para
que acaben de desarrollarse. Cuando las partes aéreas se ponen
mustias del todo debemos desenterrarlos y guardarlos.
Rosales: Podaremos
los rosales eligiendo los brotes más adecuados, antes de que
éstos se desarrollen demasiado. Controlar
los pulgones que puedan aparecer para que no lleguen a convertirse en
un problema. Los capullos enfermos se retiran para que los demás
crezcan mejor. Cortamos
las rosas según se van secando para que no consuman recursos
de la planta y provocar además la salida de nuevas flores.
El
Estanque: Dividiremos
las plantas acuáticas que lo necesiten. Con
la llegada del calor es probable que el agua se vuelva verde por la
proliferación de algas. Los peces se comienzan a alimentar según
recobran la actividad. Como estarán débiles tras el duro
invierno, se les puede dar algún complemento que les fortalezca
y algún producto que prevenga enfermedades. Cuando se aproxima
el verano se puede iniciar la plantación de ejemplares acuáticos
nuevos. Cada varios años, en esta época, se vaciará
y se hará una limpieza a fondo del estanque.