En: Kentia palm
Bella geometría de la hoja de la kentia
La kentia es una palmera monoica (ambos sexos en la misma planta), de la familia de las palmáceas. Crece hasta los 10 metros de altura. Tiene un sólo tronco, cilíndrico y regular, con el comienzo verde con anillos de color claro. Las hojas son largas y pinnadas. Florece en ramilletes y da unos frutos ovalados de color marrón.
Variedades: howea forsteriana, howea belmoreana.
Originaria: de Oceanía, de las islas del Pacífico Sur.
Kentias decorando la entrada al Museo Lazaro Galdiando, en Madrid
Situación: a la sombra. En regiones cálidas, como las costas mediterráneas; no resiste las heladas continuadas ni intensas. En tierra con buen drenaje, el encharcamiento puede matarla.
Cultivo: por su elegancia y su poca necesidad de luz se utiliza mucho como planta de interior. También se cultiva fuera en macetas. Necesita la humedad, con riegos moderados. Le perjudican la calefacción y las corrientes de aire. En ambientes secos se deben pulverizar las hojas. Crece muy despacio.
Transplante: de ser necesario debe hacerse con mucho cuidado, no lo soporta nada bien.
Multiplicación: por las semillas.
Problemas: le afectan la falta de humedad, la sequedad del ambiente y tampoco tolera la tierra encharcada.
Vista superior de esta majestuosa kentia