Frutos de la zarzamora formados por pequeñas drupas, variedad rubus "inermis"
El fruto del frambueso es la frambuesa. Es en realidad un grupo de frutillos, que pueden ser de color amarillo, negro o rojizo, siempre muy dulces y jugosos. Al recoger el fruto maduro, éste se separa del receptáculo floral que queda unido a la planta. Los frutos se pueden tomar frescos, en mermeladas o en conservas; tienen propiedades terapéuticas, como tónicos, diuréticos, astringentes, depurativos y antirreumáticos.
Especies y variedades: existen unas cuantas especies silvestres y se cultivan bastantes variedades.
Rubus idaeus, es el frambueso europeo. Mide hasta 1,5 m. de alto y ancho. Adaptado al frío, puede ser caduco o perenne. Tiene tallos lisos y rojizos, con algunas espinas. Las hojas miden unos 15 cm., con el borde aserrado. Las flores son blancas, pequeñas, de cinco pétalos, aparecen en los tallos laterales nacidos el verano anterior. Produce frutos aromáticos y sabrosos, rojos por lo normal, a veces blancos o amarillos. Tiene varios cultivares:
R. idaeus ‘Autum Bliss’, fácil de cultivar, es la variedad de otoño más popular y segura. Produce fruto de forma continua hasta que llegan las heladas. Los frutos son medianos y de color rojo.
R. idaeus ‘Glen May’, con frutos muy sabrosos a comienzos del verano.
R. idaeus ‘Killarney, también a principios del verano da unos frutos con mucho sabor.
R. idaeus ‘Strigosus’, es el frambueso rojo americano.
R. idaeus ‘Tailor’, con tallos fuertes y largos. Hacia el otoño maduran los frutos, rojos y de talla media.
Rubus deliciosus, del oeste de Norteamérica. Mide unos 3 m. y es caducifolio. Las hojas son redondeadas o con forma de riñón, tienen de 3 a 5 lóbulos y casi 8 cm. de ancho. Las ramas sin espinas tienen una corteza que se desprende. Florece en primavera. Las flores son blancas, de 5 cm. de diámetro. Les siguen los frutos de color rojo púrpura.
Rubus fructicosus, o zarzamora, también llamada zarza. Es originaria del norte de Europa. Tiene el porte extendido, crece como zarza salvaje en los bosques y linderos. Es un compendio que reúne unas 2.000 especies diferenciadas en pequeños detalles. La zarzamora cultivada alcanza unos 3 m. de envergadura con ramas arquedas y espinosas. Tiene hojas de color verde oscuro, con 3 ó 5 pecíolos, flores blancas o rosadas de 2,5 cm. y produce a finales del verano unas ricas zarzamoras de jugo púrpura.
Rubus occidentalis, es el frambueso negro, nativo de Norteamérica, origen de muchos cultivares. De porte erecto, llega hasta los 2,5 m. de alto. Las ramas son espinosas y se arquean de forma que las puntas llegan a enraizar. Las hojas tienen tres lóbulos, con el borde aserrado y el envés claro. Produce pequeñas flores en racimos apretados. Las frambuesas suelen ser negras, a veces con algunas doradas.
R. occidentalis ‘Black Hawk’, es resistente y muy productivo.
R. occidentalis ‘Jewel’, muy similar al anterior.
Rubus cockburnianus, es un frambueso ornamental que se cultiva por lo vistoso de sus tallos.
Rubus flagellaris, es otra especie de uso ornamental.
Rubus illecebrosus, arbusto ornamental de porte enano, lo más interesante son sus frutos.
Rubus tridel ‘Benenden’, también se utiliza en jardinería, tiene tallos sin espinas y en primavera se cubre de flores grandes y atractivas de color blanco.
Racimo de flores de la zarzamora
Originario: de las regiones templadas del norte de Asia, Europa y América. Se encuentra entre las primeras plantas que se llevaron de Europa al norte de América.
Situación: al sol, en cualquier tipo de terreno, que sea húmedo, con un buen drenaje y medianamente fértil. Su resistencia a las heladas va de moderada a muy fuerte.
Cultivo: se cultiva por el fruto. Hay frambuesos que fructifican en verano, sobre las ramas del año anterior, y otros que lo dan en otoño, en las ramas de la temporada.
Poda: durante la época de reposo. En las variedades que dan fruto en otoño se cortan todos los tallos a ras del suelo. En las de verano sólo se cortan los tallos que han fructificado, dejando los nuevos. Las variedades ornamentales florecientes se podan en otoño retirando algunas de las ramas más viejas. Las ornamentales que se cultivan por sus tallos se podan del mismo modo, a comienzos de la primavera.
Multiplicación: mediante las semillas, por chupones enraizados o plantando esquejes en verano; también dividiendo las raíces en invierno.
Problemas: sensible a la roya y a la antracnosis. Algunas variedades se han naturalizado volviéndose invasivas.